A tan solo 30 minutos de navegación desde el centro de la ciudad, estarás tirando las cañas y disfrutando de la pesca, con vistas impresionantes del skyline de la ciudad. En Taboga también puedes hospedarte y disfrutar de sus bares y playas después de tu día de pesca.
Las islas de Otoque, Boná y Estivá, a 40 km (25 millas) al sur de la ciudad, tienen escenarios de película en medio de un océano profundo donde viven varias especies de peces picudos. Navega con cámara en mano, a los delfines les encanta acompañar los botes.
Un poco más alejado, a más o menos dos horas en bote desde la ciudad, está el Archipiélago de las Perlas, un paraíso rebosante de vida. Allí podrás navegar entre más de 200 islas, agua cristalina, playas de arena blanca, y una gran variedad y población de peces grandes y pequeños. Esta zona es épica para el avistamiento de ballenas, que cruzan el Pacífico entre julio y octubre.
